El Atlético de Madrid sacó un triunfo más, gracias al remate del francés Antoine Griezmann, que tan sólo tres minutos contra el Espanyol, fueron suficientes para definir una victoria del equipo rojiblanco.
Los dirigidos por Simeone ya ligan diez partidos oficiales seguidos sin perder, y este sábado se enfrentaron a los catalanes, con un Griezmann sobrado de talento, movilidad y gol.
En tres minutos, cuando su rival apenas había cruzado la mitad del campo con la pelota controlada, el francés sacó un remate raso con la izquierda, por delante de su marcador, tras una asistencia de Óliver Torres, que fue inalcanzable a pesar de la estirada de Pau López.
El gol condicionó el rumbo del partido para el Atlético, porque se vio tan pronto por delante en el marcador que apareció alguna dosis de relajación.
Sin embargo, una mala noticia para el cuadro colchonero surgió antes de la media hora: la lesión del portugués Tiago Mendes, uno de sus mejores futbolistas en este primer tercio de la temporada.
Su caída al suelo tras chocar su pierna derecha con la espalda de Marco Asensio y su gesto rápido y acelerado de dolor con la mano en alto hacen temer de una lesión importante.
De momento, a la espera de pruebas, el centrocampista fue retirado en camilla, aclamado por el público y trasladado a una clínica cercana para realizar más exámenes, ya que sufrió un traumatismo medio en la tibia derecha.
A pesar de que el Atlético buscó un gol más para sentenciar y evitar cualquier sorpresa de última hora, éste no le hizo falta, pues ya había ganado el partido a los tres minutos de juego.
