El Atlético de Madrid preparó el derbi del próximo domingo contra el Real Madrid con un entrenamiento este viernes en el escenario de la contienda, el estadio Wanda Metropolitano.
El entrenador argentino Diego Pablo Simeone contó con todos los jugadores disponibles a excepción del uruguayo José María Giménez, lesionado, y del mexicano Héctor Herrera, ausente por motivos familiares.
El resto de futbolistas está listo para un derbi con una influencia capital en el devenir clasificatorio de LaLiga Santander, en la que el Atlético es primero con 58 puntos y el Real Madrid tercero con 53, empatado con el Barcelona y ambos con un partido más. Lo que ocurra en el Metropolitano determinará si el líder amplía la distancia o si la lucha por el campeonato se estrecha.
Con el Wanda Metropolitano como refugio para los ensayos de este viernes, por los entrenamientos de esta semana se puede deducir que Simeone duda en quién será compañero del uruguayo Luis Suárez en la punta del ataque: el miércoles fue Marcos Llorente quien ocupó ese puesto, mientras ayer probó con el portugués Joao Félix.
Si Llorente es el elegido, su posición en el centro del campo sería para Saúl Ñíguez, mientras que si es el mediapunta luso el que sale de inicio, Llorente jugaría de interior y el ilicitano perdería su puesto. El francés Thomas Lemar, recién recuperado de un golpe en Villarreal, encadenó este viernes su segundo entrenamiento con el grupo y podría ser otra opción como interior.
El resto de posiciones parecen, a día de hoy, decididas para el portero Jan Oblak; los defensas Kieran Trippier, Stefan Savic, Felipe Monteiro y Mario Hermoso; Koke Resurección como pivote con Yannick Carrasco y Ángel Correa como extremos; y Luis Suárez en punta, sea con un 4-4-2 o con el 5-3-2 habitual en los últimos meses.
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