El Villarreal ganó por 0-2 al Betis y sigue al acecho de una plaza en la Champions de la que le separan tres puntos, tras superar con autoridad y hurgar en la herida de un equipo andaluz que contó con Andrés Guardado de titular y por 78 minutos, pero jugó con diez todo el segundo tiempo por la expulsión del francés Nabil Fekir al ver dos amarillas en dos minutos.
Los castellonenses resolvieron con un doblete de Gerard Moreno, máximo goleador nacional con 15 tantos, primero de penalti a los 7 minutos y luego tras un gran recorte a Sidnei y batir a Joel Robles a la media hora ante un Betis impotente, que se quedó con diez en el tiempo añadido del primer tiempo por la expulsión de Fekir, lo que ya fue una losa para un equipo muy tocado anímicamente.
El choque comenzó igualado, pero el cuadro castellonense, con un tiro de Trigueros que desvió a córner Joel Robles en una buena parada, avisó pronto de sus intenciones y se adelantó a los 7 minutos con un gol de penalti de Gerard Moreno, tras un agarrón al colombiano Carlos Bacca de Marc Bartra, que protestó la decisión.
Los verdiblancos, implicados pero con problemas para llegar arriba, replicaron cumplido el primer cuarto de hora en una falta de Sergio Canales que acabó en gol en propia meta de André Zambo Anguissa, pero fue anulado en el minuto 15 al haber tres béticos en fuera de juego y entender el colegiado, previa consulta al VAR, que alguno interfirió en el despeje del camerunés hacia su portería.
El Betis quiso reponerse y tuvo otra ocasión en un cabezazo de Bartra que salió ligeramente desviado y un 'pase de la muerte' del galo Nabil Fekir, expulsado luego en el tiempo añadido por dos amarillas muy seguidas, al que no llegó nadie.
Gerard aprovechó la reincidencia de los verdiblancos en su fragilidad defensiva, su gran lastre toda la temporada, para hacer el 0-2 a la media hora tras un recorte espectacular a Sidnei y batir por bajo a Joel.
El equipo de Alexis Trujillo notó el golpe y, aunque buscó la reacción con ataques directos y a balón parado, el Villarreal controló sin problemas e incluso pudo ampliar su renta en otro tiro de Gerard que sacó bajo los palos Bartra, a ocho del descanso, ante un Betis muy intermitente y castigado por el devenir del partido.
La segunda parte desgastó mucho a los verdiblancos, que, faltos de fuerza y con la impotencia del marcador adverso, de la mala racha -sólo ha ganado un partido de seis tras el regreso de LaLiga- y de su mala imagen en esta etapa, sólo pudieron contrarrestar las intentonas de un Villarreal que no marcó más goles por que no apretó más.
El equipo de Calleja se gustó por momentos sobre el césped y se dedicó a controlar, una faceta en la que fue aún más superior con la entrada de gente de calidad como Santi Cazorla, Bruno Soriano, el veloz extremo Samuel Chukwueze o Paco Alcácere, y pudo ampliar su ventaja en claras ocasiones de Bacca -antes de ser sustituido por el nigerianos- y de Cazorla por dos veces.
Al final, derrota de un Betis que no se redime de su última goleada y victoria de un Villarreal que se encontró un partido cómodo por su eficacia en la primera parte y que sigue muy pujante.