El exfutbolista internacional francés Wissam Ben Yedder ha sido declarado culpable de los cargos de agresión sexual, conducir bajo los efectos del alcohol y desobedecer a las autoridades en un juicio celebrado en Niza. La sentencia, dictada apenas cuatro semanas después de la intensa audiencia, le impone dos años de prisión condicional, una multa de 5.000 euros, la suspensión de su licencia de conducir por seis meses y la obligación de indemnizar a la víctima, una mujer de 23 años, con 6.500 euros (5.000 por daño moral y 1.500 por costas judiciales).
La condena de Ben Yedder se deriva de los incidentes ocurridos la noche del 6 al 7 de septiembre de 2024, cuando fue detenido en su residencia de Cap-d'Ail tras una denuncia presentada por una joven. Según el testimonio de la víctima, el exdelantero intentó besarla y, posteriormente, se masturbó frente a ella en el coche de su padre, lo que originó la denuncia ante las autoridades.
El fiscal de Niza solicitó el 15 de octubre pasado una pena de dos años y medio de prisión, con 18 meses suspendidos bajo libertad condicional. Durante su declaración en el juicio, Ben Yedder alegó que no recordaba los hechos debido a un alto nivel de alcohol en su sangre. El exjugador, quien reconoció atravesar un período personal muy complicado, confesó haber estado bebiendo durante varios días consecutivos, lo que provocó, según su versión, problemas de memoria.
"Es un período un poco difícil, tuve problemas con mis agentes, con mi esposa… llevaba tres o cuatro días bebiendo", relató Ben Yedder ante el tribunal. El futbolista, que ha tenido dificultades emocionales y familiares en los últimos años, explicó que el consumo de alcohol había aumentado gradualmente, al punto de no recordar lo sucedido en la noche de los hechos. "Ya bebía antes, pero en pequeñas dosis y de vez en cuando. A causa del alcohol tengo problemas de memoria", dijo.