La campaña del Liverpool en la Fase de Grupos de la Europa League concluyó de manera deslucida al sufrir una derrota por 2-1 frente al equipo belga Union Saint-Gilloise en Bruselas. El técnico Jurgen Klopp optó por un equipo considerablemente modificado, brindando oportunidades a varios graduados de la academia. Sin embargo, su estrategia no dio frutos, y el conjunto belga logró una victoria memorable.
El Union Saint-Gilloise tomó la delantera gracias a la destacada actuación de Mohamed Amoura. Este corrió más allá de la línea defensiva del Liverpool, eludió al portero Caoimhin Kelleher y disparó a puerta vacía para inaugurar el marcador.
Jarell Quansah igualó para los Reds al aprovechar un rebote desde un córner, marcando así su primer gol con el club. Cameron Puertas volvió a poner al Union Saint-Gilloise en ventaja al finalizar la primera mitad con un potente disparo bajo que superó a Kelleher. A pesar de que Puertas aparentemente amplió la ventaja local poco después de la hora de juego, el VAR intervino y anuló el gol.
Esta derrota plantea interrogantes sobre algunos jugadores del Liverpool que buscaron impresionar a Klopp, ya que el entrenador optó por alinear el once titular más joven en la historia del club en competiciones europeas. Los jóvenes talentos del Liverpool tuvieron una oportunidad valiosa, pero la experiencia resultó en un resultado adverso que deja a algunos jugadores con trabajo por hacer para ganarse un lugar en el equipo principal.