El mediocampista de la Fiorentina, Edoardo Bove, enfrenta una difícil encrucijada en su carrera deportiva luego de sufrir un episodio médico alarmante durante el encuentro ante el Inter. Aunque actualmente se encuentra estable y en recuperación, las últimas noticias apuntan a que su futuro en la Serie A podría estar comprometido.
El pasado domingo, Bove, de 22 años, colapsó en el campo de juego en un episodio que inicialmente causó gran conmoción entre jugadores, cuerpo técnico y aficionados. Según informes, el italiano habría sufrido una crisis epiléptica que lo dejó inconsciente. Rápidamente, recibió atención médica y fue trasladado de emergencia al hospital.
En un primer momento, los medios locales atribuyeron el desmayo a una caída repentina de potasio en la sangre, posiblemente desencadenada por un choque con el neerlandés Denzel Dumfries momentos antes de su colapso. Pese a la gravedad del incidente, Bove fue extubado tras 13 horas, mostrando signos alentadores de recuperación.
Secuelas que complican su continuidad en Italia
Sin embargo, según información de la Gazzetta dello Sport, estudios posteriores revelaron una complicación preocupante: una cicatriz en el ventrículo izquierdo de su corazón, secuela que podría requerir la implantación de un desfibrilador. Esta solución médica, aunque efectiva para garantizar su seguridad, entra en conflicto con las estrictas regulaciones del futbol en Italia, donde el uso de dispositivos de arranque cardíaco está prohibido tanto a nivel profesional como amateur.
La situación recuerda el caso de Christian Eriksen, quien tras un episodio similar en la Eurocopa 2020 tuvo que buscar continuidad en ligas extranjeras menos restrictivas, como la Premier League.
Cabe mencionar que Bove ya había enfrentado problemas cardíacos en 2020, cuando sufrió miocarditis tras superar el COVID-19. Desde entonces, era sometido a controles médicos regulares que siempre mostraron resultados favorables. Este historial médico agrega una capa de complejidad a su recuperación y a las decisiones que deberá tomar junto a su equipo médico y representantes.
Por ahora, Bove ha sido dado de alta de cuidados intensivos y permanece en una sala común, bajo observación médica. En las próximas semanas, será sometido a evaluaciones exhaustivas para determinar si podrá continuar su carrera futbolística y, de ser así, en qué condiciones.
