Hace tiempo que Gareth Bale no se siente cómodo en el Real Madrid y aunque el club está dispuesto a escuchar ofertas del mejor postor, son pocos los que podrían pagar el sueldo del galés.
El principal inconveniente radica en que Bale es el jugador mejor pagado de la plantilla merengue con un salario anual de 15 millones de euros, los cuales no parece estar dispuesto a negociar y no hay equipos que quieran pagar.
Su baraja de opciones se reduce a regresar a la Premier League bajo las órdenes de José Mourinho en su antiguo equipo, el Tottenham, pero son los Spurs quienes no pretenden pagar mucho por el atacante, ni por sueldo.
La última alternativa que le resta sería la MLS con el Inter de Miami, pero el cuadro de David Beckham tampoco ha hecho gran cosa para contratar al '11' del Madrid.
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