El Liverpool, tras el duro partido contra el Milán en la Champions League, cimentó su triunfo contra el Crystal Palace (3-0) con los saques de esquina, desde donde surgieron los tres goles del partido.
Un tanto de Sadio Mané, que descansó contra los milanistas, otro de Mohamed Salah y el tercero de Naby Keita fue suficiente para que los de Jürgen Klopp vencieran a un incómodo Palace, que jugó de tú a tú a los 'Reds' y soñó con sacar algo positivo de Anfield.
Los de Patrick Vieira, con un gran Cono Gallagher, rondaron durante buena parte del partido el gol, tanto en los primeros minutos, donde incluso estrellaron una pelota en el palo, como en la segunda parte, hasta que el tanto de Salah les mató.
El egipcio fue el que propició la llegada de los tres tantos, primero en una jugada ensayada en un córner donde remató en el primer palo, Guaita hizo un paradón y Mané mandó el rechace a la red, y más tarde, a diez minutos para el final, empalando una pelota suelta en el área tras otro saque de esquina.
Además, Salah puso el córner del tercero, donde Guaita despejó en primera instancia, pero no pudo hacer nada ante la volea de Keita desde fuera del área.
El Liverpool salva con dos victorias una semana complicada y se coloca líder de la Premier con trece puntos, a la espera de lo que haga el Manchester United el domingo. Los 'Reds' visitarán entre semana al Norwich City en la Copa de la Liga.