El presidente del Napoli, Aurelio De Laurentiis, comparecerá ante el Tribunal Nacional de la Federación de Futbol Italiana (FIGC) por haber permitido que tres jugadores de la primera plantilla que estaban en cuarentena domiciliaria jugaran un partido de Serie A el pasado mes de enero.
La Fiscalía ha enviado a De Laurentiis ante la sección disciplinaria del Tribunal por permitir que el eslovaco Stanislav Lobotka, el kosovar Amir Rrahmani y el polaco Piotr Zielinski viajaran con el resto de la plantilla napolitana a Turín para jugar contra el Juventus el pasado 6 de enero, informó la FIGC en un comunicado.
Los tres jugadores disputaron ese encuentro, correspondiente a la vigésima jornada de la Serie A y que finalizó con empate cuando deberían haber estado cumpliendo cuarentena domiciliaria hasta el día 9 de enero.
De Laurentiis y el responsable sanitario del Napoli, Raffaele Caninica, "no hicieron cumplir o, en cualquier caso, no supervisaron do el cumplimiento de las normas sobre controles sanitarios".
"En particular, por haber permitido o, en todo caso, no haber impedido que los jugadores Lobotka, Rrhamani y Zielinski partieran de Nápoles hacia Turín en avión el pasado 5 de enero, y participar el 6 de enero Juventus-Napoles", explicó la FIGC.