Mohamed Salah anotó un penal en el minuto 84 para salvar el empate 2-2 del Liverpool ante el Manchester United el domingo en la Premier League.
Los aspirantes al título parecían sufrir su primera derrota en la liga desde febrero, después de que dos impresionantes goles de Bruno Fernandes y Kobbie Mainoo pusieran al United por delante en Old Trafford. Luis Díaz había puesto al Liverpool dominante al frente en la primera mitad, pero el equipo de Jürgen Klopp iba perdiendo en los últimos 10 minutos del tiempo reglamentario hasta que Aaron Wan-Bissaka derribó al sustituto Harvey Elliott en el área.
Mientras los abucheos resonaban en el estadio, Salah tranquilamente envió al portero del United, Andre Onana, por el camino equivocado para poner al Liverpool empatado en puntos con el primer lugar, el Arsenal, y uno por delante del Manchester City, en el tercer lugar.
Durante mucho tiempo, el club de Merseyside parecía dispuesto a volver a situarse en la cima, con una actuación imponente en la primera mitad en la que los visitantes registraron 15 tiros a portería, en comparación con ninguno del United.
La única sorpresa fue que los jugadores de Klopp no aprovecharon al máximo esa disparidad y terminaron el encuentro con un punto por bando.