La Fiscalía Anticorrupción ha abierto diligencias de investigación tras recibir una denuncia presentada contra el presidente de la Federación Española de Futbol (RFEF), Luis Rubiales, sobre su gestión al frente del organismo y en relación al contrato para la celebración de la Supercopa de España en Arabia Saudí.
La denuncia, presentada hace un mes por parte del presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Futbol (Cenafe), Miguel Ángel Galán, no solo se dirige contra Rubiales, sino también contra la RFEF, el jugador del Barça Gerard Piqué y su empresa Kosmos al considerar que su actuación perjudicó el patrimonio del organismo.
Según informan a Efe fuentes fiscales, el departamento que dirige Alejandro Luzón ha acordado la apertura de diligencias de investigación por los hechos denunciados, aunque precisan que de momento no se dirige contra ninguna persona en concreto.
Galán pedía investigar si se podrían haber cometido varios delitos de corrupción, administración desleal, prevaricación o cohecho.
Dicha denuncia, posteriormente ampliada, señala que Rubiales "pactó con Gerard Piqué el cobro de una comisión multimillonaria por el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí" y añade que el presidente de RFEF "presionó a las autoridades de Riad para que abonaran al jugador del FC Barcelona hasta 24 millones de euros por disputar el torneo en ese país y trató luego de ocultar la participación del futbolista en el contrato".
Además del "pelotazo" que, según el denunciante, ambos querían dar con la venta de la Supercopa, Galán también llevó ante la Fiscalía el pago "presuntamente irregular" por parte de la RFEF del alquiler de "un piso de lujo" de Rubiales en el centro de Madrid. Una renta que ascendía a 3 mil 100 euros mensuales, precisa la denuncia.
Galán acudió a Anticorrupción tras la publicación de diversas informaciones en 'El Confidencial' en torno a la gestión de Rubiales y el futbolista del Barcelona Gerard Piqué para la organización de la citada competición.
Los documentos publicados hace unas semanas indicaban que el contrato firmado para seis ejercicios con la compañía pública saudí, Sela, aseguró la cantidad de 40 millones de euros por cada edición a la RFEF y 4 para Kosmos, empresa de la que Piqué es copropietario.
En la ampliación de la denuncia, Galán indica que Rubiales desechó un acuerdo con Qatar más ventajoso que el de Arabia Saudí, pero sin el dinero pactado para Piqué.
Tanto Rubiales como Piqué defendieron su actuación y aseguraron que la operación fue legal.