El partido de Primera División de la Eredivisie neerlandesa Vitesse-Sparta de Róterdam fue suspendido hoy en el tiempo de descuento debido al que uno de los objetos que se lanzaron desde la grada, un vaso de plástico con cerveza, impactó en el portero del equipo visitante, Maduka Okoye.
El guardameta había parado un penalti en el minuto 64 y, en los últimos instantes del encuentro, algunos seguidores lanzaron fuegos artificiales al césped, hiriendo a un cámara de televisión.
En el descuento, cuando el marcador iba 0-1, un espontáneo saltó al campo y se encaró con el portero Okoye, a lo que el éste le respondió con gestos que se fuera del campo, y luego un vaso de plástico con cerveza impactó en el arquero, que cayó al suelo.
El árbitro Rob Dieperink detuvo el juego y, ya en el túnel de vestuarios, los jugadores del Sparta de Róterdam se negaron a seguir jugando, por lo que el colegiado decidió suspender el partido.
El director general del Vitesse, Pascal van Wijk, explicó a la cadena neerlandesa ESPN que tienen imágenes de las personas que tiraron objetos al campo y “pueden esperar una larga prohibición de acceso al estadio”.
“Es un día negro para la familia Vitesse y los verdaderos seguidores, no para las dos o tres personas que lo han arruinado”, añadió.
Los incidentes contrastaron con la imagen inicial del encuentro, cuando los futbolistas de los dos clubes se alinearon en el centro del campo en forma de V para representar la palabra “Vrede”, "paz" en idioma holandés.
La Real Federación Neerlandesa de Fútbol anunció que ofrecerá al Vitesse y al Sparta de Róterdam tres opciones para determinar el resultado: dar el partido por finalizado y declarar al equipo visitante como ganador, que se jueguen los siete minutos de descuento que restaban o repetir el partido por completo.
