Ferland Mendy, defensa francés del Real Madrid, advirtió del peligro del Atalanta, rival madridista en los Octavos de Final de la Liga de Campeones, y elogió su juego y la pegada que exhibe en sus partidos.
"Tenemos que tener cuidado. No han llegado aquí sin motivo. Sabemos que es un equipo que juega bien y marca muchos goles. Será difícil y creemos que será un muy buen partido. Tendremos que jugar lo mejor que podamos para ganar", aseguró en una entrevista a Uefa.
Mendy dedicó elogios a su entrenador, el francés Zinedine Zidane, por el que siente admiración. "Es una leyenda y, para ser honesto, es un honor ser entrenado por él. Cuando te paras frente a él desprende carisma. Es bueno verlo y también hemos hablado de la selección francesa. Me ha dado consejos y me gusta darlo todo en cada partido".
El defensa francés recordó su llegada al Real Madrid y una oportunidad que no podía dejar escapar. "Cuando llegué sabía cómo sería y que había grandes jugadores. Al principio eres tímido y luego empiezas a conocer a la gente y aprendes cómo funciona el grupo. Ahora estoy jugando más, pero sólo pienso en aprovechar los partidos que me dan. No diría que soy indiscutible. Además es una locura y un hito pasar de casi dejar el futbol a jugar en el Real Madrid".
Y terminó recordando momentos duros que le marcaron en su juventud. "Es una gran historia. Pasé por un momento difícil, pero salí bien. Pasé siete años en el PSG, empecé con el sub-11 y me lesioné antes de ingresar en la academia. Tenía artritis en la cadera y tuve una infección, así que tuve que operarme y estuve mucho tiempo en el hospital. Allí estuve enyesado dos o tres meses.
"Cuando me operaron, el médico vino a verme y me dijo que el fútbol había terminado para mí. Llegó incluso a hablar de una amputación. Tuve que estar en una silla de ruedas bastante tiempo, más tarde con muletas y luego tuve que aprender a caminar de nuevo", explicó.