El Ministerio Público Federal (MPF) de Brasil ha solicitado al Superior Tribunal de Justicia (STJ) que el exfutbolista Robinho cumpla en el país la condena de nueve años de cárcel impuesta en Italia por su participación en la violación de una joven albanesa en una discoteca de Milán en 2013.
La fiscalía presentó un dictamen argumentando que el cumplimiento de la condena en Brasil es necesario, tanto para respetar la legislación nacional como para demostrar el compromiso del país con la represión del crimen y la cooperación jurídica internacional.
En un comunicado, el MPF destacó que la negativa a obligar a Robinho a cumplir la condena podría resultar en la impunidad de un crimen reconocido internacionalmente en términos de materialidad y autoría.
La defensa de Robinho había cuestionado la legalidad de algunos procesos utilizados para recabar pruebas que llevaron a la condena del exfutbolista, pero el órgano fiscal refutó estos argumentos.
Robinho, actualmente en Brasil y sin pasaporte, fue declarado culpable en 2022 por la Justicia italiana por participar en una violación colectiva. La sentencia, firme en Italia, busca ahora su ejecución en Brasil, ya que la Constitución brasileña prohíbe la extradición de ciudadanos del país.
La violación tuvo lugar en 2013, cuando Robinho jugaba para el Milán. En el incidente también estuvo involucrado un amigo suyo, Ricardo Falco, quien también fue condenado por los hechos.