Atlético de Madrid recibió este domingo en su estadio, el Wanda Metropolitano, la copa del Campeón de LaLiga Santander 2020-21, obtenida en la última jornada tras ganar este sábado por 1-2 al Valladolid.
El capitán rojiblanco, Jorge 'Koke' Resurrección, recogió la copa de la mano del presidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), Luis Rubiales, y la levantó ante un estadio Metropolitano vacío de espectadores, solo con las autoridades y familiares, mientras varios centenares de aficionados animaban desde fuera.
Acompañado por confeti rojiblanco y el himno del club, fue el colofón de un acto breve en el que, pese a no tener espectadores, la afición rojiblanca se hizo presente con sus cánticos desde el exterior del estadio, mientras los futbolistas, vestidos con vaqueros y una camiseta rojiblanca especial con una inscripción en la que se recordaba el éxito, fueron recibidos por las autoridades.
El primero en tomar la palabra fue el presidente rojiblanco, Enrique Cerezo, que comenzó recordando al joven aficionado rojiblanco, Saúl, de 13 años, que falleció el sábado en un accidente de coche en la Plaza de Santa Ana de Madrid cuando celebraba el título.
Mientras los futbolistas celebraban en el interior, en el anillo exterior del Wanda Metropolitano se encendían bengalas y se cantaban cánticos, a los que acabaron uniéndose los futbolistas de la primera plantilla, desde la altura de la plataforma superior del estadio, cerrada al público.
Desde allí, los jugadores del Atlético ofrecieron la copa de la Liga recién recibida y festejaron respetando la distancia sanitaria con los aficionados el undécimo título liguero de la entidad, el octavo trofeo logrado desde la llegada de Simeone como técnico, en diciembre de 2011.