Christian Eriksen está de vuelta, el danés reapareció de la mejor manera con Dinamarca tras 1.100 días de haber sufrido un infarto en la cancha durante la Eurocopa 2020 y que estuvo a nada de quitarle la vida; sin embargo, la vida le dio la revancha en Alemania.
Le bastaron 16 minutos a Eriksen para recordar que Dios da revanchas en los momentos menos impensables y mostrar una vez más que los milagros sí existen.
Eriksen volvió con el pecho como un roble, que hace menos de cuatro años estuvo a punto de dejarlo sin vida, para controlar el balón y hacer un golazo con la pierna derecha para desatar la euforia en el Mercedes-Benz Arena ante más de 60 mil almas.
El danés obtuvo la revancha que nadie se lo hubiera imaginado y hoy está nuevamente jugando al futbol como en sus mejores tiempos en busca de ese trofeo que embellezca su carrera.
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