Y ya lo dicen los Cadillacs en su más grande éxito: "me dicen el Matador, me están buscando". Este fin de semana en España, Checo Pérez sólo debe salir a matar o morir en el ruedo, pues de no hacerlo, Max Verstappen se escaparía hacia un Tricampeonato que en este momento parece inevitable.
Con 39 puntos de ventaja, 144 por 105 de Sergio, el neerlandés es el piloto más en forma de la Fórmula Uno desde 2021, pero el mexicano tiene el talento necesario para vencerlo.
Tras un pésimo fin de semana en Mónaco, en el que no sumó por primera vez desde el 10 de julio de 2022, cuando se retiró del Gran Premio de Austria por un choque. Pero la revancha llega inmediatamente con la parada en Cataluña, en donde tiene que sacar su lador 'matador'.
"¿Qué pasó en Mónaco? Yo no estaba allí", comentó el tapatío a DAZN. "Fue un desastre para mí, todo lo que pudo haber salido mal salió mal", añadió.
Y sí, fue uno de los peores fines de semana para Checo bajo el nomex de Red Bull. Cuando parecía que podía competir directamente por el Campeonato de Pilotos, el terrorífico fin de semana en el Principado bajó la euforia.
Sin embargo, el mismo Pérez Mendoza sabe que la temporada apenas está calentando y con seis fechas disputadas es el único piloto que presume arrancarle victorias al Bicampeón del Mundo, quien está destinado a marcar una era de dominio en las pistas de la máxima categoría del automovilismo deportivo.
"Sabemos que tenemos el monoplaza más rápido en el día correcto y este circuito debería ser adecuado para nosotros. Sólo necesito asegurarme de tener un fin de semana perfecto de principio a fin", indicó ante la prensa ya en la Madre Patria.
"Este fin de semana se trata de comenzar de nuevo y asegurarnos de volver a los altos estándares que hemos establecido durante toda la temporada. Quiero recompensar a mi equipo por todo su trabajo duro, con un buen resultado en Barcelona", sentenció el tricolor.