Tras un espectacular combate, Alexa Grasso logró retener el cinturón peso mosca de la UFC ante Valentina Shevchenko, ya que los jueces determinaron un empate, resultado que favoreció a la mexicana.
Sin embargo, esta situación no le gustó en lo absoluto a la peleadora de Kirguistán, pues afirmó que los jueces "se sintieron presionados por el Día de la Independencia de México".
“Sí, hice lo necesario para ganar, pero creo que los jueces sintieron presión por el Día de la Independencia en México y los mexicanos están festejando”, mencionó al término de la pelea.
Por si no fuera poco, reiteró su disgusto y molestia por la decisión y dijo que hubiera conseguido el triunfo en una "competencia justa".
"Sabía que iba a ser una guerra, iba a pelear hasta el final y en una competencia justa la victoria hubiera sido mía”, agregó.