No cabe duda de que para practicar un deporte extremo se requieren solamente las medidas de seguridad pertinentes y una gran imaginación, tal como lo hizo Domen kofic, quien se atrevió a escalar el puente Solkan, que tiene 36 metros de altura y que atraviesa el río So?a.
Pese a que su cuerpo está sujeto con unas cuerdas, es innegable que para practicar esta disciplina se requiere de inteligencia, paciencia y sobre todo mucha fuerza en brazos y piernas.
El puente de Solkan en Eslovenia era el lugar predilecto para los amantes de escalar, ya que es el arco más grande del mundo. Lo asombroso es que está en pie desde 1905, pero fue construido en solamente 18 días y requirió de mil 960 metros cúbicos de piedra