En los deportes acuáticos el contacto con las imponentes fuerzas de la naturaleza es un riesgo que se mantiene latente a cada instante y en cada movimiento.
Existe una pequeña pero valiente cantidad de atletas que se proponen desafiar las inclemencias que representa la práctica de deportes en agua con las condiciones climáticas más extremas.
Ya sea con vientos que superan los 50 nudos, lluvias torrenciales y hasta mar picado que produce olas de gran tamaño los intrépidos deportistas lo arriesgan todo, por vivir una experiencia única y dejar marcas casi sobrehumanas.
François Gabart es uno de estos hombres, el francés surca el mar sobre su velero con las condiciones más radicales en su contra, en esta ocasión lo podemos observar en un entrenamiento en las costas de Gran Bretaña.
La siguiente muestra de este tipo de desafíos, es la que realiza Bertrand De Broc al entrenarse para la Vendée Globe, una regata que consiste en dar la vuelta al mundo en solitario. Una de las pruebas más duras en el mundo de la vela.
Los barcos que se aventuran en la Volvo Ocean Race no son una mera canoa para dar un paseo por la bahía. Casi cualquier maniobra exige un esfuerzo ensayado por parte de toda la tripulación, así cuando la atmósfera se enfurece, la coordinación y la agilidad tienen que multiplicarse.