Tener acceso al agua potable es un derecho de la población, se debe disponer de una cantidad suficiente, salubre, aceptable y accesible, pero en el DF este derecho se ve afectado debido a la baja disponibilidad de agua por el alto porcentaje de habitantes, además de que todas sus fuentes presentan problemas serios.
Parte del problema en el DF se deriva de que la mayor parte del abasto se da por extracción de acuíferos profundos, donde hay agua con alta mineralización y presencia de sustancias nocivas para el consumo
Por otra parte, el agua superficial contiene un alto índice de material contaminante, la mayor parte sulfuros derivados de materia fecal.
En la actualidad, la ciudad ha crecido tanto que el problema de suministro es bastante serio, pues los últimos 20 años la población capitalina se ha triplicado, mientras que el consumo de agua se ha sextuplicado.
En México sólo 5.5 por ciento de las aguas nacionales están libres de contaminación, 70 por ciento de los ríos están muy alterados, por lo que cada vez es más complicado dotar del recurso a los habitantes de la ciudad de México, aseveró Axel Carlos de Gante Islas, director general de Hidroecología, empresa experta en el tratamiento de aguas residuales.
En conferencia con alumnos de Ingeniería de la UNAM, Gante mencionó que es importante redefinir el papel de las plantas de tratamiento residual, así como la instalación de sistemas de filtraje para los acuíferos, mismos que académicos mexicanos ya han desarrollado.
“El problema no es gastar menos el líquido, sino recuperarlo y emplearlo las veces que sea necesario. Eso implica salvar el agua del planeta”, dijo.