A Eial Strahman, exfutbolista argentino con nacionalidad israelí que jugó en México (Leones Negros en 2012 y Venados de Mérida 2014) se retiró hace un año y la vida lo ha llevado a aprender a vivir con los conflictos bélicos de la zona como el que actualmente se vive por la invasión de Hamas (grupo terrorista palestino).
Él vivió en carne propia un ataque (2021) y ahora le toca a la distancia, pues está de vacaciones en su natal Argentina, junto a su esposa, quien sí tiene a su familia en Israel, y por la situación no pudieron viajar, pero pese a las dificultades sociales que ponen en riesgo su vida, no ha pensado en mudarse de país.
“Estoy bien, por suerte mi familia y mis amigos están a salvo, igual que mi mujer que es rusa, pero vivió y creció en Israel, y eso da tranquilidad. A mí me tocó de vacaciones en Argentina, de alguna forma se le puede llamar suerte, tenía pasaje para volver ayer (lunes), pero el vuelo se suspendió, y ahora trato de ayudar difundiendo lo que pasa en Israel para que lo sepa de primera mano; cuando abran los aeropuertos con mi mujer analizaremos si volvemos o no lo antes posible porque ahora el aeropuerto está cerrado. Lo vivo con emociones encontradas, siempre pegado al teléfono y oyendo las noticias, y estando en comunicación con la gente cercana que tenemos allá.
Por un lado, agradecido con no tener que vivirlo personalmente, pero por otro con sentimiento de que necesito estar allá para ayudar en medida de lo posible, la población israelí es muy especial y cuando pasan situaciones como esta lo primero que hay es unidad”, dijo a RÉCORD, al tiempo en que reiteró que, pese a todo, no se va de Israel.
“No, para nada. Vivo ahí desde hace tres años, he vivido un conflicto estando allá, no de esta magnitud, pero la sociedad te enseña que cuando esto pasa hay que unirse, fortalecerse y seguir construyendo el país sobre la gente que no tiene la suerte de seguir viviendo cuando estas tragedias suceden, en honor a ellos”.
El recuerdo que Eial tiene de México es grande y satisfactorio e incluso compartió que sigue en contacto con amigos mexicanos que están pendientes de él.
“Tengo los recuerdos más lindos en dos clubes que me trataron de manera maravillosa, con amigos que hablo hasta hoy. La sociedad mexicana es muy educada, me han llenado sobre todo de mensajes deseando que esté bien, compañeros, técnicos, periodistas, no me defraudan, al contrario”.