Brasil, ya clasificado para el Mundial de Qatar 2022, goleó este martes por 4-0 a Paraguay en su antepenúltimo partido por las Eliminatorias sudamericanas, y se consolidó como líder invicto, al tiempo que acabó con cualquier esperanza de clasificación de los paraguayos.
Con una nueva victoria, con goles de los juveniles Raphinha, Antony y Rodrygo y del veterano Philippe Coutinho en un partido en que el seleccionador brasileño,Tite, aprovechó para experimentar nuevos jugadores, Brasil tiene ahora doce triunfos y tres empates en quince partidos, con los que suma 39 puntos, cuatro más que Argentina, su inmediato perseguidor.
Paraguay, en cambio, quedó hundido en el penúltimo lugar de la clasificación de las eliminatorias sudamericanas, con 13 puntos, y ya sin posibilidades clasificar al Mundial de Qatar o de avanzar a una eventual repesca.
Brasil, con el mismo trío de jóvenes atacantes con que empató 1-1 la semana pasada con Ecuador (Vinicius Junior, Matheus Cunha y Raphinha), comenzó presionando desde el comienzo del partido y Raphinha tan sólo necesitó de un minuto para abrir el marcador, pero su anotación fue anulada por toque de mano constatado por el VAR.
Raphinha sólo calmó su sed de gol en el minuto 27 al recibir un lanzamiento perfecto de Marquinhos, dominar en el centro del área y patear con la izquierda para abrir el marcador. Fue su tercer gol en siete partidos por la selección brasileña.
La selección brasileña también comenzó acelerada el segundo tiempo y en un minuto Raphinha estrelló un balón contra el travesaño tras recibir un levantamiento de Vinicius.
El atacante del Real Madrid fue el protagonista de los primeros quince minutos del segundo tiempo, con avances por la extrema izquierda y peligrosos levantamientos, pero fue sustituido por Antony en el minuto 60 ante el compromiso de Tite de no sobrecargar a jugadores con partidos importantes por sus clubes, pero salió aplaudido y aclamado por la hinchada.
Un minuto después Philippe Coutinho, convocado nuevamente por Tite pese a su irregularidad y sus lesiones, correspondió a la confianza del seleccionador con un golazo desde la entrada del área tras recibir una asistencia de Marquinhos. El centrocampista anotó su decimonoveno gol con la Canarinha tras una sequía de casi año y medio.
Con la victoria prácticamente garantizada y un amplio dominio, la Canarinha se dedicó a administrar su ventaja parcial, lo que no impidió que Antony y Raphinha abusaran de jugadas individuales en su intento de mostrar servicio ante Tite y reclamando un cupo en la lista de convocados para el Mundial.
Otro que intentó aprovechar los diez minutos que tuvo para mostrar sus condiciones fue el también juvenil Rodrygo, que sustituyó a un Raphinha aquejado de calambres.
Y fueron precisamente Antony y Rodrygo los que anotaron los dos últimos goles de Brasil en los últimos cinco minutos del partido.
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