Un equipo de arqueólogos de la Universidad de Cambridge ha creado una reconstrucción facial de una mujer neandertal de hace 75 mil años. Esto desafía las ideas previas sobre su apariencia y sugiere que son más similares a los humanos modernos de lo que se pensaba.
Los cráneos de los neandertales tienen enormes arcos superciliares y carecen de mentón, con una parte media de la cara saliente que da como resultado narices más prominentes. Pero el rostro recreado sugiere que esas diferencias no eran tan marcadas en la vida”, se puede leer en el informe.
Reconstruyen rostro de una mujer neandertal
La dama prehistórica conocida como Shanidar Z ha sido identificada recientemente, y su reconstrucción facial revela rasgos inesperados que ofrecen una nueva perspectiva sobre las interacciones entre humanos y neandertales. La arqueóloga Lucía López-Polín lideró este proceso meticuloso, ensamblando a mano más de 200 fragmentos del cráneo, incluyendo las mandíbulas superior e inferior. La reconstrucción muestra una línea de cejas menos prominente, un mentón más fuerte y una nariz más pequeña, con una expresión que sugiere una sonrisa suave y pómulos definidos. Estos detalles podrían indicar la posibilidad de interacciones más cercanas y personales entre humanos y neandertales en el pasado prehistórico.
El hallazgo de Shanidar Z, uno de los neandertales mejor preservados encontrados recientemente, data del 2018 en una cueva en Irak. Su rostro, probablemente afectado por un deslizamiento de rocas, plantea nuevas preguntas sobre la historia y la evolución humana.
Este descubrimiento subraya la coexistencia y el posible mestizaje entre neandertales y humanos anatómicamente modernos durante un periodo prolongado de tiempo. La investigación continua brindando nuevas revelaciones sobre nuestros antepasados y el intrincado panorama de la evolución humana.
