¿Quién podría odiar las selfies? Si son las que nos permiten capturar nuestro mejor ángulo y compartirlo con nuestros amigos. Bueno, pues ya existe una persona, quien por tratar de tomarse una fotografía en un museo terminó por romper varias piezas muy valiosas.
Las cámaras de vigilancia capturaron el terrible momento en el que una joven trata de retratarse dentro de una exposición en Los Angeles, cuando de pronto cae y tira una base que comienza con el efecto dominó y así, todas las piezas de esa fila terminaron con daños.
Se calcula que el accidente costará aproximadamente 200 mil dólares, tal vez esta será la selfie con 'mayor valor' para la chica.