Mediante una conferencia de prensa, la Fiscalía General de Baja California confirmó que los tres cuerpos sin vida localizados el pasado viernes, corresponden a los de los hermanos australianos Jake y Callum Robinson, así como al de su amigo, el estadounidense Carter Rhoad, desaparecidos desde hace una semana en México.
El móvil del asesinato fue el intento de robo de una de las camionetas en las que se movían los extranjeros, para después arrojar sus cuerpos a un pozo de agua ubicado en el poblado de Santo Tomás, en el municipio de Ensenada, Baja California.
“Al ver que se les salió de control lo que originalmente fue un robo, tratan de deshacerse de los cadáveres arrojándolos a este pozo, a una distancia de entre 6 y 7 kilómetros del primer hallazgo (de otro cadáver). Esto fue lo que sucedió, no fue un ataque por su calidad de turistas, fue con el ánimo de robar un vehículo, seguramente desconocían el origen de estas personas”, declaró María Elena Andrade Ramírez, fiscal general del Estado.
Los mataron de un balazo en la cabeza
En la investigación del pasado viernes, fueron cuatro los cadáveres que se encontraron, sin embargo el cuarto no tiene relación alguna con el caso. Sobre los surfistas australianos y su amigo estadounidense, análisis hechos por servicio médico forense confirmaron que los asesinaron de un disparo de arma de fuego en la cabeza.
“Una herida producida por proyectil disparado por arma de fuego penetrante de cráneo”, fue la causa de la muerte de los jóvenes, según se mencionó en la conferencia de prensa.
Hasta el momento se sabe que son tres los detenidos como presuntos sospechosos de su participación en los asesinatos, teniendo uno de ellos antecedentes penales por narcomenudeo y violencia intrafamiliar
Será en las próximas horas cuando familiares de los hermanos australianos Jake y Callum Robinson, así como de su amigo, el estadounidense Carter Rhoad, lleguen al estado de Baja California para reconocer los cuerpos y comenzar los trámites para llevarse los restos a sus respectivos países.