En la estación de esquí de Gudauri, Georgia, un telesilla tuvo una falla eléctrica lo que provocó que varios esquiadores salieran expulsados de sus asientos y al menos ocho personas resultaran heridas.
El accidente se produjo cuando, al no funciona el embrague en la instalación, el sistema dio marcha atrás a una alta velocidad, por lo que los demás usuarios atemorizados optaron por saltar de las sillas por su propia cuenta aunque estuvieran a varios metros de altura.
El Ministerio del Interior de Georgia apuntó a que la falla se debió a una parada de emergencia del telesilla, lo que ocasionó que se acelerara en dirección opuesta.