Ryan García, ha estado en el centro de una polémica tras dar positivo en dos pruebas antidopaje. Los controles, realizados antes y después de su pelea contra Devin Haney el 20 de abril, detectaron la presencia de Ostarina, una sustancia prohibida.
El 1 de mayo se informó que García había dado positivo en ambos controles, lo que generó una fuerte reacción de la comunidad boxística. Devin Haney, su oponente en la pelea, fue uno de los primeros en expresar su descontento, pidiendo la anulación del triunfo de García. Además, el prominente promotor Eddie Hearn exigió una suspensión de por vida para el boxeador.
El periodista Dan Rafael, quien ha seguido de cerca el caso, informó que la Comisión de Nueva York, donde se llevó a cabo la pelea, ya recibió los resultados de la muestra B. Esta muestra, abierta el 22 de mayo, también dio positivo por Ostarina, según reportes. La Comisión tendrá que convocar a una audiencia con Ryan García durante el verano para abordar el asunto.
Tras conocerse los resultados de la muestra B, Ryan García reaccionó en su cuenta de X (anteriormente Twitter) con un mensaje sarcástico: "Me encantan los esteroides", que fue posteriormente eliminado. Esta reacción ha generado aún más controversia y especulación sobre su posible culpabilidad.
La historia de García no se detiene ahí pues, en una reciente entrevista había sido cuestionado sobre qué cambios haría en caso de ser comisionado del boxeo a lo que comentó: “Imagínate una liga de boxeo donde se pueda usar esteroides”, generando aún más polémica.
García, que en todo momento ha mantenido su inocencia, enfrenta ahora un futuro incierto en su carrera profesional, con la posibilidad de sanciones severas por parte de las autoridades boxísticas. La situación continúa en desarrollo y se espera que la audiencia de la Comisión de Nueva York aporte más claridad sobre el caso y las posibles consecuencias para Ryan García.
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