El inmaculado brazo izquierdo de Julio Urías sigue tocado por los dioses y con él forjó una joya de pitcheo en una de las tardes más memorables de su carrera.
El mexicano firmó la mejor y más prolongada apertura en Grandes Ligas, permitió ante los Rockies solo tres imparables en labor de siete entradas completas, con seis ponches, para así conquistar su primera victoria de la temporada en un debut de antología en la naciente temporada con los campeones Dodgers.
El sinaloense demostró seguir en estado de gracia y los angelinos volvieron a fiarse de su caballo de hierro, quien jaló con la carroza de Dave Roberts en el juego final de una serie por tercera ocasión consecutiva contando la Serie Mundial y la Serie de Campeonato de la Liga Nacional del año pasado. Se trató de la primera victoria en la carrera del zurdo de 24 años contra los Rockies, con quienes tiene ahora marca de 1-1 de por vida.
Urías firmó una poderosa actuación de 7 IP, 3H 1BB 6K y solamente dejó un corredor de herencia en el cierre del octavo rollo con el juego 4-0 a favor de Los Ángeles hasta ese momento.
Pero Ryan McMahon, quien le conectó el último imparable de la tercia que recibió el azteca, timbró en la registradora durante el relevo de Jimmy Nelson y así se le escapó la blanqueada al culichi.
De todas formas, al sinaloense le alcanzó para sumar su primer triunfo del año con los de Colorado como víctimas y con quienes tenía marca de 0-1 con efectividad de 5.77 en 10 juegos en siete aperturas.
En seis juegos (cuatro aperturas) en Coors Field, tenía récord de 0-1 con efectividad de 6.55 (16 ER / 22.0 IP), cifras se balancearon con su poderosa apertura en el apenas cuarto juego de los Dodgers en el año, donde marchan ya con récord de 3-1 después de adjudicarse la primera serie ante los Rockies.
Urías lanzó 24 cambios, su uso del campo del 30.3% más del doble la temporada pasada, cuando registró 13.2%, y por una buena razón. Consiguió ocho strikes con swing incluido en el cambio y firmó cuatro de sus seis ponches con ese lanzamiento. Una mejora bastante notable considerando que el serpentinero azteca terminó con seis ponches en su cambio en toda la recortada temporada pasada en la salida más larga de su carrera dejando atrás las 6 entradas y un tercio conseguidas en 2017 y 2020.
