La primera gran celebración en el banquillo de Estados Unidos durante este Mundial de Baloncesto llegó apenas un par de minutos después del salto inicial, cuando Myles Turner bloqueó un tiro frente al aro. Y con eso, el tono del juego quedó establecido, para que a la postre los de las 'Barras y las Estrellas' vencieran 88-67 a República Checa al iniciar su búsqueda de un tercer título consecutivo de la Copa del Mundo.
Esta Selección Estadounidense ha puesto el énfasis en la defensa, y ello fue evidente este domingo, desde el comienzo de su partido inicial en el Grupo E. Donovan Mitchell anotó 16 puntos para liderar el equipo, en una noche en que todos sus integrantes se repartieron los encestes de forma bastante equitativa.
“Esa debe ser nuestra tarjeta de presentación”, dijo el entrenador de Estados Unidos, Gregg Popovich. “Vamos a intentar ejecutar cada vez mejor a medida que pase el tiempo, pero defensivamente tenemos que poner nuestro énfasis allí. Es lo que tenemos que hacer para tener una oportunidad”.
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Harrison Barnes añadió 14 puntos, Kemba Walker anotó 13 y Jayson Tatum finalizó con 10 para los estadounidenses. Turner capturó siete rebotes y aportó un par de tiros bloqueados. “Mientras ganemos, eso es todo lo que importa”, dijo Tatum.
Tomas Satoransky, el exalero de Washington que fue canjeado a Chicago durante el verano, encabezó a los checos con 17 puntos.
“Hicimos muchas cosas buenas”, dijo Mitchell. “Defendimos bien. Tenemos muchas cosas en las que definitivamente podemos trabajar, y creo que este es un buen inicio de torneo”.
Los checos anotaron los primeros cuatro puntos del último cuarto para acercarse 66-52, pero los estadounidenses no se vieron amenazados. Walker hizo un triple para detener la mini racha. Encontró a Mitchell en la esquina para otro triple que puso el marcador 72-52 un minuto después y el desenlace fue un mero trámite a partir de entonces.