La participación de Nordin Amrabat, jugador de Marruecos que sufrió una conmoción cerebral ante Irán, en el partido que disputó su selección ante Portugal el pasado martes, despertó una gran polémica porque el marroquí incumplió el protocolo médico.
El reglamento de la FIFA y el del Sindicato Mundial de Futbolistas, FIFPro, ordena que cualquier futbolista que haya sufrido este tipo de lesión, deberá guardar reposo por lo menos seis días antes de regresar a la actividad deportiva.
Sin embargo, Amrabat saltó al campo de titular para enfrentar a los lusitanos cinco días después de su lesión. Pese a que el internacional africano salió con casco protector, se desprendió de él tras los primeros 15 minutos del juego, poniendo en riesgo su integridad física.
Al respecto, la Federación de Marruecos reconoció ante Michel D'Hooghe, presidente de la Comisión de Medicina de la FIFA, que no respetaron el protocolo porque el jugador insistió en que quería participar en el partido.
“El médico de la Selección Marroquí, Abderrazak Hifti, tomó la decisión de permitir jugar a Amrabat presionado por el propio futbolista, que llegó a sufrir una pérdida de memoria en el lance”, expuso la Federación marroquí ante la FIFPro.
Hasta el momento no se ha dado a conocer si habrá una sanción por incumplir el reglamento, no obstante, el delantero pordría vivir el momento amargo del día si se toman acciones por violar las reglas.
Por ahora, se espera que Nordin Amrabat vuelva a ver actividad, pues aseguró recientemente: “Estoy mejor y espero jugar ante España. Queremos ganar nuestro último partido en el Mundial”. #FrescuraSinAmargura