Mientras el Estadio Hidalgo se llenaba de algarabía con el triunfo de Pachuca sobre Toluca, los Diablos Rojos pasaron un momento grisáceo tras la derrota. Uno de los más afectados, sin lugar a duda, fue Tiago Volpi.
El arquero brasileño no pudo evitar esconder su sentir durante la transmisión de Marca Claro, donde fue entrevistado. “No fue fácil. No fue fácil llegar hasta acá, nadie quiere perder una final, pero son dos equipos, uno tiene que ganar y otro perder”, declaró.
“Fue muy duro, por la manera en que fue, pero no tengo nada de qué quejarme. Tengo que agradecer por estar de regreso a este país”, dijo el guardameta del Chorizopower.
Asimismo, mencionó que hubo momentos en que pensó en dejar el futbol, pero recapacitó. “Hoy es un día difícil, te quedas algo frustrado, pero la vida es así. Ojalá nos toque levantar la copa”, rescató el portero con la voz entrecortada.