Una vez más el arbitraje causó polémica en un partido de Pumas. Cuando los universitarios conseguían mantener el cero ante Cruz Azul, el silbante César Arturo Ramos pitó un penalti que le dio la victoria a la Máquina, decisión que para Andrés Lillini no fue la correcta.
El técnico de la escuadra auriazul reprobó la resolución de Ramos, quien además amonestó a Johan Vásquez por una supuesta falta sobre el jugador celeste Juan Escobar, sin embargo, prefirió mantenerse a la raya sobre el tema, ya que dijo, lo pueden multar si da alguna opinión sobre el hecho.
“Vi la jugada, no creo que haya sido penal, para nada pero bueno, no puedo hablar más porque sino la federación me multa, mejor no digo ninguna opinión", declaró en conferencia de prensa.
Y a pesar de que Lillini consideró que su equipo hizo un buen juego, el resultado dejó un sabor amargo no sólo para él, también para sus dirigidos, aunque aseguró debe dar la cara por su grupo y ocuparse por la falta de gol que no les ha dejado de perseguir en lo que va de este torneo.
"La percepción de desigualdad. Me siento frustrado, decepcionado, el que se sienta acá soy yo, la cara la tengo que poner yo por los 24 jugadores que están con una amargura terrible. La falta de gol la tenemos de mejorar”, apuntó.
Por otra parte, el argentino se dijo orgulloso de los jóvenes canteranos que ha visto despuntar y no tiene duda que podrán mantenerse en primera división, ya que aseguró son el proyecto del club y no les dejará hasta que puedan consolidar su carrera profesional.
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"Estoy convencido que lo pueden hacer porque en ocasiones son determinantes. Lira, Gutiérrez, Rodríguez, Amaury García, Ángel García son jugadores que sí son contemplados para mí en primera división. Estoy orgulloso de ellos porque este es el proyecto, fui elegido para esto y no me voy a hacer a un lado de seguir consolidándolos", expresó.