Celso Ortiz y Alfonso González, jugadores de Rayados, habían presentado un cuadro gripal que los mantuvo sin jugar en la Jornada 10.
La directiva de La Pandilla se movió rápidamente y le ordenó al cuerpo médico que les realizaran una prueba de influenza y coronavirus para tener precisiones sobre su estado de salud, de acuerdo con TUDN.
Después de que las pruebas fueron entregadas, Monterrey supo que los estudios arrojaron incompatibilidad con el coronavirus y ya se encuentran totalmente recuperados a la espera de volver a integrarse con sus compañeros.
Cabe recordar que el equipo regiomontano ya tomó acciones de prevención, como el no dejar que los aficionados tuvieran contacto con los jugadores ingresando a El Barrial, ya que pese a ser a puerta cerrada la práctica, era costumbre que al final dieran acceso a un pequeño toldo para que de ahí pidieran fotos y autógrafos; sin embargo, la orden fue no dejarlos entrar por prevención.