Bravos resultaron los futbolistas de FC Juárez en su debut en el torneo, pues terminaron venciendo 2-1 a Necaxa que no tuvo con qué generarle la más mínima preocupación a los fronterizos.
Y es que Bravos y Rayos comenzaron su camino en el Torneo Grita México Cl22, y mientras los del 'Tuca' lo hicieron con el pie derecho, para los de Aguascalientes la temporada arrancó con un sinsabor.
Y es que muy pronto en el partido, incluso a un minuto del arranque, Diego Rolan no perdonó; empujó la pelota que le dejó Gabriel Fernández y así llegó el primero para los fronterizos en lo que fue una buena noche para el delantero uruguayo.
Necaxa no daba tintes de cómo podría mejorar y mientras lo intentaba, el árbitro Luis Enrique Santander tuvo que recurrir al VAR para rectificar la expulsión de Ventura Alvarado, que acabó en una amonestación.
Sin embargo, lo mejor del partido llegó en el segundo tiempo.
Los Bravos aún no terminaban de acomodarse cuando los Rayos, a los 47 minutos marcaron el empate a uno con la anotación de Alejandro Zendejas. Entonces, el árbitro central apareció nuevamente cuando decretó un penalti a favor de los locales y de inmediato, sin dudar y por un aparente insulto, expulsó (50') al portero Ángel Malagón.
Para los de Aguascalientes el juego se estaba convirtiendo en un infierno porque no llegaban al área rival, se quedaron con un hombre menos y de paso, Diego Rolán les volvió a anotar al cobrar la pena máxima, pero casi ocho minutos después de la expulsión, pues Malagón se negaba a abandonar el campo.
Pero nada impidió que el uruguayo marcará el segundo tanto de los Bravos, luego de que Edgar Hernández desviará pelota y con el contraremate Rolán anotó.
Y mientras el 'Tuca' Ferretti contemplaba a su equipo desde un palco, pues debía pagar su castigo (de tres partidos por expresiones misóginas y homofóbicas), Pablo Guede movió sus piezas para rescatar un partido que se le había ido de las manos y para ello debutó a Nicolás Castillo, pero el chileno aunque trató, no pudo hacer nada por su nuevo equipo.
Y al final, Juárez tomó la primera bocanada de oxígeno en la temporada y Necaxa deberá empezar a corregir antes de que le sea demasiado tarde.
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