La Rebel lo cumplió y no se juntó como era costumbre en sus visitas al Estadio Azteca; sin embargo, eso no impidió que la Goya retumbaba en la casa del Cruz Azul, aunque el sonido local trató de 'taparla'.
Y es que, en el partido entre La Máquina y Pumas, la barra auriazul no se hizo presente en gran cantidad, esto para cumplir con la norma de no asistir a estadios de visita.
Pese a ello, algunos ‘coincidieron' en la cabecera sur (donde normalmente se ubica la porra de visita) y de ahí salían las Goyas en las que se acababa uniendo los demás aficionados felinos presentes, pero de inmediato, el sonido local reproducía cánticos apoyando al cuadro celeste.
Dicha situación no es primera vez que le ocurre a Pumas en el Estadio Azteca, ya que cuando ha visitado al América, con o sin la restricción a las barras de visita, el sonido local se hace presente en cada cántico de los fanáticos de Pumas, particularmente en la Goya
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