Chivas es un equipo golpeado por las deudas. El Guadalajara ha tenido que adoptar posturas conservadoras debido a que la fluidez de capital es escasa por las secuelas de la pandemia de Covid-19.
Los altos mandos de la directiva del Rebaño están conscientes de que la situación económica es complicada, por lo que ha sido uno de los impedimentos para que se trunque el proceso de Víctor Manuel Vucetich al frente del conjunto rojiblanco.
En caso de que se cesara al Rey Midas, el Rebaño tendría que desembolsar una fuerte cantidad de dinero, una suma que hoy en día el conjunto tapatío no tendría la solvencia para poder cubrirlo, ya que ha reformulado diversas deudas que ha venido arrastrando.
Uno de los pendientes de la directiva del ‘chiverío’ es la liquidación de Luis Fernando Tena, a quien le han tenido que ir pagando en plazos lo que le correspondía de liquidación por la terminación anticipada de su vínculo laboral.
Esta medida ha sido una constante en los equipos de primera división, quienes negocian los montos y fechas para la realización de pagos, evitando así llegar a controversias y por ende, el timonel puede estar disponible en el mercado para contratarse con cualquier otra institución.
Otros de los pendientes de la gente del Guadalajara son los pagos de los montos de la adquisición de futbolistas, siendo el caso más sonado el de Necaxa, con quien deben cubrir un total que ronda los 20 millones de dólares, esto por las compras de Jesús Angulo, Cristián Calderón y Alexis Peña.
La apertura de los estadios devuelve la esperanza de los clubes de poder ir recuperando capital que ha quedado inmóvil durante la pandemia; sin embargo, al no poder abrir el total de su capacidad, tampoco les permite obtener las ganancias deseadas.