Después de caer ante Atlas en el Clásico Tapatío, el director técnico de Chivas, Fernando Gago fue despedido con abucheos y un sector de aficionados le arrojaron objetos y cervezas.
Al finalizar el partido, el entrenador del Guadalajara abandonó la banca de manera rápida, sin embargo entre los abucheos un sector de aficionados arrojó cervezas y objetos al aún técnico Rojiblanco.
El técnico Rojiblanco se convirtió en el enemigo de la afición de Chivas, después de que se habló de una posible salida, por lo que fue abucheado en dos ocasiones, la primera en el recibimiento del equipo y posteriormente durante las alineaciones del equipo.
La afición estuvo constantemente en contra del estratega Rojiblanco, luego de que un gran sector consideró una traición la posibilidad de que puede abandonar el equipo después del interés de Boca Juniors por sus servicios.