Atlas logró sacar la ventaja sobre el Puebla, que aunque mínima (pues ganó 1-0), al final le sirve para llegar al juego de Vuelta con mayor ánimo y confianza. Aunque no está todo dicho y menos cuando La Franja jugará en su casa.
La serie entre Atlas y Puebla comenzó en el Estadio Jalisco. El séptimo y tercer lugar, respectivamente debían sacar la mayor ventaja posible para con ello cerrarlo todo en el Cuauhtémoc el fin de semana; sin embargo, muy pronto en el partido se prendieron las alarmas camoteras, pues a tan sólo 20 minutos el mejor hombre de La Franja, Christian Tabó tuvo que salir de cambio por una lesión, pero ni así los poblanos bajaron el ritmo.
Aunque sin duda fueron los Rojinegros quienes en varias ocasiones y por conducto de la velocidad de Renato Ibarra, tuvieron oportunidades claras de gol, pero no concretaron ninguna. Incluso, también Atlas perdió a uno de sus mejores hombres, porque fue el mismo ecuatoriano quien en la recta final del primer tiempo salió de cambio lesionado.
Y la insistencia rojinegra rindió frutos. Fue hasta que al minuto 59, Ían Torres quien simplemente punteó la pelota y la mandó al fondo de la red, luego de un error de la defensa poblana, pues dejaron solo al atlista, y con eso bastó para que Atlas se llevara la ventaja del juego de Ida.
Y para el juego de regreso, Atlas con el gol de la Ida en teoría llega mejor que el Puebla, que tendrá que mejorar notablemente y que a pesar de que no ganó, tiene a su favor la posición en la Tabla General, y empatando el global, haber quedado en tercero le hace pasar a la siguiente fase.