El grito prohibido apareció en el Clásico Tapatío. En los minutos finales, la frustración de la afición de Chivas provocó qué apareciera la palabra prohibida.
Durante todo el encuentro, el sonido local apareció en cada intervención de los dos arqueros para evitar que se escuchara la palabra prohibida.
Sin embargo, en el tiempo de compensación, durante los despejes de Camilo Vargas, la fanaticada rojiblanca se metió con él y gritó en un par de ocasiones.
En la primera, el arquero sudamericano ganó unos segundos para hacer su despeje, en donde la afición entonó el ‘eeeh' durante varios segundos hasta que impactó el esférico y soltaron la palabra restante.
Unos segundos después, el cancerbero de Atlas volvió a entrar en juego con el esférico, en donde volvió a despejar y la gente reincidió.
El silbante Fernando Guerrero hizo caso omiso y prefirió terminar el partido unos segundos después, poniendo fin a la frustración de jugadores y aficionados.