BRENDA GRACIANO
El sueño del Bicampeonato para Tigres se esfumó en unos minutos y eso se reflejó en el rostro de Damián Álvarez, quien acudió visiblemente afectado al Estadio Universitario para decir hasta pronto a la casa de los felinos.
"La verdad no hay muchas palabras para explicar lo de ayer, estoy muy conmovido por lo que pasó, no hay mucho consuelo cuando nos eliminan de esa manera, nada más queda la sensación de que se hizo todo lo posible para pasar y que en 2 minutos ese sueño del Bicampeonato quedó a la deriva”, dijo.
El mediocampista reconoció la ilusión que existía por hacer historia y disputar una Final ante el Monterrey, pues hubiese significado una serie de época para la ciudad, aunque señaló que por el momento son cosas que se deberán digerir.
"En verdad era una ilusión completamente, era accesible en el momento en que nosotros nos propusimos ganar el torneo y como lo hicimos 90 minutos, lamentablemente no se pudo concretar, no se pudo tener esa ilusión de tener esa final en la ciudad de Monterrey con Rayados pero bueno son cosas que uno tiene que saber digerir en estos momentos y pensar en lo que viene”, comentó.
Álvarez señaló que si bien el equipo se encuentra tranquilo, el humor con el que rompieron filas no fue el mejor pues el mismo jugador se dijo como una persona al que le ‘arrebatan un dulce de la mano’.
"Todos debemos estar tranquilos, obviamente que el humor no es el mejor porque de la manera en que uno queda fuera, ya palpando una Final es como que te arrebatan el dulce de la mano. Hay una frase típica de que esto es futbol y a veces pasan cosas que son incomprensibles y ahora a pensar en lo que viene que vienen cosas muy buenas para el semestre que viene”, finalizó