ÁLVARO CRUZ
Luce lejano aquel 7 de febrero de 1982, cuando Manuel Negrete daba, al minuto 89, el triunfo a los Pumas sobre el Guadalajara en el Estadio Jalisco; victoria que jamás se imaginó, pasaría a la historia.
Con el empate a cero goles de ayer, para cuando felinos y rojiblancos se vuelvan a ver las caras en la Perla Tapatía, se cumplirán 31 años sin que los universitarios consigan el triunfo como visitantes.
El saldo de la maldición universitaria en Guadalajara es de 13 derrotas por 21 empates; resultado que predomina desde el Apertura 2008, ya que el último triunfo del Rebaño Sagrado fue en el Clausura de ese año, por 3-0.
La hegemonía es grande, los resultados, poco atractivos; son tres décadas que lucen interminables para unos felinos que siguen sin poder disfrutar de un triunfo ante las Chivas, que se muestran imbatibles en su cancha cuando un puma se cruza en su camino.
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