Rubén Omar Romano, técnico del Puebla, se quejó amargamente del arbitraje, pues considera que su equipo fue mejor que La Máquina y las jugadas no se marcaron como debían.
"El arbitraje estuvo mal, cuando está así hay que decirlo; las jugadas divididas eran para su lado, el gol anulado. Me siento mal porque jugamos bien, pero dieron tres minutos de agregado y se pasaron".
El timonel considera que en todo el trámite del juego se impusieron al Cruz Azul y merecían más que un empate.
"Con un hombre menos los últimos ocho minutos fuimos superiores en todos los sentidos, jugamos un gran partido y así pasa, cuando hay peso específico en algunos jugadores pasa, ellos no sabían ni por donde".
Por supuesto que no eximió a sus jugadores de las fallas, pues destaca que la diferencia también radica en el mayor talento que tienen ciertos jugadores cementeros.
"Estamos hablando del peso específico de algunos planteles que tienen jugadores con gol, que tienen talento, acá fallamos. Estoy conforme porque venimos a jugarle al superlíder y fuimos superiores".
Romano dijo no tener miedo de que lo despidan y aseguró que Puebla jugará mejor a partir de ahora.
"Sí, este Puebla de aquí para arriba".