ROCÍO CEPEDA
Perdón y olvido. Humberto Suazo regresó a las canchas con el Monterrey anoche en el duelo contra San Luis, dando por terminado el enojo de su parte y hasta de su técnico por los problemas del pasado, además de dejar en el olvido su reproche.
Un primer tiempo de ver goles en la banca con semillitas y sus compañeros. En el segundo, la afición regia lo mandó pedir a gritos y Victor Manuel Vucetich accedió. Si bien Rayados ya ganaba 3-0, la hinchada no quería mas goles sino arropar de nuevo al chileno goleador.
"Oe oe oe Suazo Suazo" empezó a cantar la zona de Preferente en el Estadio Tecnológico al minuto 63';. Ocho minutos mas tarde, el timonel, dándole una palmada en la espalda, lo mandó a la zona de juego para que dejar atrás todo resentimiento.
Se persigno, estiró bien sus piernas y entró al campo con cierta ansiedad, como buscando reponer el tiempo alejado del campo. En ese momento el graderío se puso de pie, comenzaron los aplausos y con ellos el trote de Suazo para adentrarse a su zona.
Quizá en su aporte al juego el Chupete pasó desapercibido, pero como el propio timonel rayado lo comentó al finalizar el partido, en esta ocasión ganó el andino en tiempo y confianza para su futbol.
"Es positivo para todos que Humberto Suazo se reencuentre con la afición, para el mismo, para que retome su confianza y que vea que el equipo lo ha respaldado", expresó Vuce al fin del juego.
