Fidel Kuri, dueño de los Tiburones Rojos, se mostró molesto con el estreno del VAR en la Liga MX. El propietario del Veracruz aseguró que ninguno de los penales que se marcaron en contra de los jarochos debió haber sido considerado como falta.
La primera jugada en la que la tecnología intervino en la Liga MX fue una barrida de Luis Caicedo sobre Juan Pablo Vigón. Originalmente se había marcado tiro de esquina, pero una vez que Adonai Escobedo, árbitro del encuentro, revisó la jugada se decretó la pena máxima, misma que fue atajada por Pedro Gallese.
Sin embargo, un minuto más tarde el mismo Caicedo intentó desperjar el balon, pero un atlista punteó la bola y el zaguero terminó haciendo contacto con el rojinegro por lo que se sancionó otro penalti.
Kuri consdieró que su equipo siempre es perjudicado por el árbitraje; sin embargo en este mismo partido el VAR decretó un penal a favor del Tibu por una mano del central rojinegro, Leyton Jiménez.
