Darío Verón, defensor de Pumas, elevó la tensión en la Gran Final luego de propinar un manotazo a André-Pierre Gignac.
El delantero de Tigres buscaban un balón largo para generar una acción de peligro, pero vio su carrera frenada luego de que el capitán de los del Pedregal levantara los brazos para interrumpir su carrera y alcanzara a golpearlo en el rostro.
El silbante Fernando Guerrero no consideró la existencia de falta y dejó correr las acciones.
Darío Verón alcanza a golpear a Gignac|ESPECIAL