Un único tanto de Nico Sánchez le bastó a Monterrey para pegar primero en la Final de la Liga de Campeones de Concacaf, lo cual mantiene el título de la zona en el aire, mismo que terminará por definirse dentro de una semana en el BBVA Bancomer.
Un primer tiempo de superioridad fue suficiente para Rayados, que al final terminó por apoyarse de manera sólida en la figura de Marcelo Barovero, quien con diversas intervenciones a favor de los suyos consiguió que La Pandilla mantuviera la mínima ventaja para hacer frente a la Vuelta.
Tras unos primeros 40 minutos con mejores oportunidades que el equipo local, el cual, tal como acostumbra, contó con un apoyo incondicional en el Universitario, llegó el gol de Rayados y fue a través de una jugada a balón parado.
Tras una ejecución de Dorlan Pabón desde el tiro de esquina, Nico Sánchez ganó la posición en el área felina para instantes más tarde conectar un cabezazo que se fue justo al lado contrario del recorrido de Nahuel Guzmán. La casa del conjunto universitario pasó del estruendo al silencio en tan solo unos segundos.
El complemento significó un mejor tiempo para Tigres; no obstante, los comandados por Ricardo Ferretti no contaban con la buena noche que Marcelo Barovbero tendría, quien terminó por erigirse como uno de los elementos más determinantes a favor de Monterrey ante los felinos, quienes ni con la presencia de André-Pierre Gignac para la segunda parte logró recomponer el rumbo de una Final que ahora deberá enfrentar cuesta arriba en la casa del eterno rival.