No es la primera vez que Cruz Azul confía en el talento de un jugador aún cuando su carrera no pasa por el mejor momento. Los cementeros ya lo hicieron una vez con Marco Fabián, quien salió de Chivas por bajo rendimiento; sin embargo, encontró en La Noria un segundo aire que fue en la puntilla para que hoy esté en Europa.
Hoy el cuadro celeste tiene enfocadas sus baterías en recuperar a Carlos Peña, aquel jugador que deslumbró al futbol mexicano con sus actuaciones en su primera etapa con León, en la que conquistó un Bicampeonato que le valió para ser considerado por Miguel Herrera para el Mundial de Brasil 2014.
El plan no dista mucho del que ejecutaron con Fabían. El primer punto en el que trabaja Caixinha es lo mental, llenar al jugador de confianza, hacerlo sentir parte importante del equipo y ayudarle a liberar presión, algo que ya hizo cuando coincidieron en el Rangers de Escocia.
En lo físico trabajan como para que llegue a sus mejor estado y pueda iniciar los partidos; futbolísticamente está en ritmo y confían en que pronto entrará en la dinámica del equipo, incluso, fuentes consultadas por RÉCORD indicaron que es notable el esfuerzo que realiza día a día para ponerse a punto y desplegar el futbol que esperan de él, pues de eso dependerá si La Máquina hace válida la opción de compra.
"Es mexicano, tiene 27 años y aún tiene mucho por delante, viene en calidad de préstamo, tiene que ganarse muchas cosas aquí para seguir y si todo eso se da favorablemente, tendremos una opción aceptable para ambos lados", expuso hace días Yayo de la Torre, presidente deportivo del club.