Les cuento una perlita de uno de los técnicos con mayor futuro en nuestro balompié, mi compa, Marcelo Michel Leaño. Resulta que cuando terminó el partido en el que Necaxa le quitó el invicto a Cruz Azul de Pedro Caixinha, el juvenil timonel de los Rayos se acercó a saludar al estratega celeste y en el intercambio de palabras, la sinceridad del novel, le pasó una mala jugada.
Me cuentan que el estratega del conjunto hidrocálido no se caracteriza por tener muchos filtros, pues es un tipo peculiar, que externa su pensar casi siempre, no de mala fe, pero que a más de uno le cae mal tanta honestidad.
Pues bien, cuando le dio la mano a Caixinha para despiderse, le agradeció el partido y aprovechó para hacerle al portugués una recomendación sincera, palabras más, palabras menos, para que no descuidara tanto la zona defensiva, pues consideró que ahí perdió el duelo ante su Necaxa. Y para las pulgas de Pedro, ya se imaginarán.
Me contaron que como que aguantó el aire el DT cementero, no estalló ni nada, pero tardó unos segundos para responder: “¿Y tú, dónde jugaste profesional o cómo? Gracias”. Dio la media vuelta y partió a su vestidor.
Gente que conoce a Marcelo desde hace tiempo me asegura que ya le pasó algo similar con otros entrenadores, como con Miguel Herrera.
Sin embargo, no es para caer mal, simplemente, las recomendacionesa para los técnicos que ya fueron campeones a pesar de que el tapatío apenas empieza su trayectoria.