Chivas despertó tarde en el torneo pues, pese a su victoria sobre León, quedó oficialmente fuera de la Liguilla del Apertura 2018
El uso del VAR para verificar una supuesta mano dentro del área local, aunado a un gol anulado de Mauro Boselli, además de la gran actuación del guardameta rojiblanco, Raúl Gudiño, fueron los ingredientes que le dieron el toque especial al partido celebrado en el Estadio León.
Los de Ignacio Ambriz fueron ampliamente dominadores en la primera parte, al grado de que Gudiño tuvo que trabajar a fondo para responder ante las constantes llegadas de Mauro Boselli y compañía.
El joven guardameta rojiblanco demostró que la no convocatoria a Selección Mexicana fue merecida, pues siguió enseñando la calidad futbolística que tiempo atrás lo llevó a militar en el balompié europeo.
Ante la falta de contundencia, la afición rojiblanca que asistió al Nou Camp, presionó a sus delanteros para que al menos metieran presión en el arco de La Fiera; el seleccionado nacional, Isaac Brizuela, les cumplió con un tiro desde fuera del área que pasó muy cerca el poste derecho de William Yarbrough, siendo la jugada más peligrosa de Chivas en el primer tiempo.
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Pese a la falta de goles, las aficiones de ambos equipos despertaron con dos polémicas; primero, no se marcó una supuesta mano del León dentro del área, que hubiera significado un penalti para el conjunto rojiblanco.
Y antes de ir al descanso, Mauro Boselli recibió un balón frente a Gudiño; con una jugada individual, el argentino lo dejó en el césped para mandar el balón al fondo de la portería; las emociones en la porra local se desbordaron, pero nadie se dio cuenta de que el juez central marcó fuera de juego y el gol tan celebrado fue anulado.
En la segunda parte salió el corazón chiva; fueron los del Rebño quienes atacaron, se esforzaron, sudaron la camiseta con la esperanza de cerrar de buena mannera el torneo y finalmente abrieron el marcador con el tanto de Zaldívar, mismo que enloqueció a la porra visitante, la cual, en forma de agradecimiento, coreó su nombre.
José Cardozo y su Rebaño, se despidieron de Guanajuato dejando una sonrisa en la afición, pero con el sabor amargo que genera estar fuera de Liguilla.
